La idea de recorrer todos los rincones del planeta despierta la imaginación y el deseo aventurero de muchos. ¿Cuál sería la mejor ruta para dar la vuelta al mundo? ¿Qué medios de transporte utilizaríamos y cuánto tiempo nos llevaría completar esta odisea? Estas son algunas de las preguntas frecuentes entre los amantes de los viajes. En este artículo, emprenderemos un viaje imaginario a través de cada uno de los países que existen hoy para satisfacer esa curiosidad y brindar una guía posible para quienes sueñan con este gran viaje. Desde la elección del punto de partida hasta las estrategias para cruzar continentes, este recorrido es un desafío de logística, resistencia y pasión por descubrir.
El punto de partida: islandia y el recorrido por europa
Islandia, situada en el extremo norte de nuestro planeta, es el punto de partida ideal para aprovechar al máximo los largos días de verano. Reykjavík, su capital, será nuestro trampolín para saltar hacia el resto de Europa.
De islandia a dublín
Un vuelo de aproximadamente dos horas y media nos depositará en Dublín, Irlanda, desde donde iniciaremos nuestra exploración europea. A continuación, un ferry nos llevará por el mar de Irlanda hasta Liverpool, y de allí, un tren hacia Londres.
Un recorrido terrestre por europa
Tras llegar a Londres, nos embarcaremos en una travesía terrestre de seis días en coche que nos conducirá por las capitales de España, Andorra, Francia, Luxemburgo, Bélgica, Países Bajos, Alemania y Dinamarca. Después, nos dirigiremos hacia los países nórdicos restantes, aterrizando primero en Oslo y moviéndonos en tren hasta Estocolmo.
Descubriendo los países bálticos y el este de europa
Nuestra ruta continua hacia los países bálticos, comenzando con un par de travesías en ferry para llegar a Finlandia y luego a Estonia. Preparados para un recorrido más extenso, alquilaremos un coche para adentrarnos en el este de Europa.
Del báltico a los cárpatos
Partiendo de los países bálticos, nos dirigiremos hacia los montes Cárpatos, alcanzando Hungría tras recorrer unos 10,000 kilómetros. Este tramo demandaría aproximadamente seis días de conducción, suponiendo unas ocho horas al volante diariamente.
Un respiro ferroviario y la visita a microestados
Tras dejar momentáneamente el coche, nos embarcaremos en un tren por el centro de Europa, explorando capitales cercanas entre sí. Visitaremos Praga, haremos una rápida visita a Liechtenstein y seguiremos hacia Suiza y Mónaco, además de pasar por otros microestados como San Marino y el Vaticano.
La travesía por oriente medio y áfrica
El siguiente capítulo de nuestro periplo nos lleva hacia el calor del Medio Oriente y las vastas extensiones de África, enfrentando desafíos únicos como temperaturas extremas y la necesidad de adaptarse a diferentes medios de transporte.
Atravesando el medio oriente
Después de Turquía, avanzamos hacia el este con Armenia, Georgia y Azerbaiyán. Posteriormente, emprenderemos un circuito terrestre que cruza áreas montañosas y desérticas, abarcando un total de 5,800 kilómetros y siete países adicionales.
Explorando la costa mediterránea y adentrándonos en áfrica
Desde la península de Sinaí y cruzando el puente del canal de Suez, continuaremos hacia Trípoli. Desde allí, dos vuelos nos llevarán a Malta y luego a Túnez. Tras recorrer la costa Mediterránea, tomaremos un vuelo directo a Mauritania, habiendo ya recorrido 40,000 kilómetros.
La odisea por américa y el regreso al viejo continente
El viaje a través de América nos dará la oportunidad de experimentar una diversidad de paisajes y culturas, desde el norte helado hasta la vibrante Sudamérica.
De américa del norte a central
Nos dirigiremos primero a Ottawa, en Canadá, para después tomar un tren a Washington D.C. Un vuelo nos llevará hasta la Ciudad de México, y a partir de ahí, iniciaremos una ruta por tierra a través de Centroamérica.
Surcando el caribe y conquistando sudamérica
Después de sortear el Tapón del Darién, navegaremos el Caribe oriental a bordo de un barco privado. Finalmente, avanzaremos por el norte y oeste de Sudamérica, ascendiendo por los Andes para posteriormente descender hasta llegar a Brasilia.
El tramo final: hacia el sur del continente
Desde la capital brasileña, proseguiremos por el interior del país hasta alcanzar Asunción y luego Buenos Aires. Para culminar, cruzamos a Monteartículo, Uruguay, el país número 195 de nuestro trayecto.
Después de 263 días y con casi 200,000 kilómetros a nuestras espaldas, habremos pisado todas las capitales del mundo. ¿Cuál sería tu ruta ideal para una vuelta al mundo? ¿Qué lugares añadirías a tu tour? Te invitamos a compartir tus ideas y comentarios. Gracias por acompañarnos en este recorrido imaginario y no dejes de explorar tú también las infinitas posibilidades que ofrece nuestro planeta.
