La maternidad es un viaje maravilloso lleno de etapas y decisiones, y una de las dudas más frecuentes que surgen entre las mujeres que están amamantando es si es posible quedar embarazadas durante la lactancia y, de ser así, si pueden continuar con el amamantamiento una vez que se confirma el embarazo. El cuerpo de la mujer atraviesa numerosos cambios hormonales que pueden influir en la fertilidad y en la experiencia de la lactancia. En este artículo, abordaremos con detalle y desde una perspectiva profesional estas cuestiones tan importantes, resolviendo las principales inquietudes para que puedas tomar decisiones informadas durante esta etapa tan especial de tu vida.
¿Es posible quedar embarazada durante la lactancia?
La lactancia materna y la fertilidad son dos aspectos del cuerpo de la mujer que están estrechamente relacionados. Numerosas madres se preguntan si, al dar el pecho, su capacidad de concebir se ve afectada. La realidad es que mientras la prolactina, hormona encargada de la producción de leche, se encuentre en niveles elevados, la ovulación puede estar suprimida, lo que disminuye las probabilidades de quedar embarazada.
El método mela como anticonceptivo
Un aspecto importante a considerar es el método MELA, un método anticonceptivo natural durante la lactancia. Tiene un 98% de efectividad cuando se cumplen ciertos requisitos: que la lactancia sea exclusiva y esté dentro de los primeros 6 meses posparto, que no se hayan presentado menstruaciones, y que las tomas sean frecuentes, sin intervalos mayores a 4 horas de día y 6 horas de noche. Sin embargo, la eficacia disminuye a medida que la alimentación del bebé se diversifica y la frecuencia de las tomas se reduce.
Continuar con la lactancia durante un nuevo embarazo
Una vez embarazada, la preocupación suele girar en torno a si se puede continuar amamantando al hijo mayor. Según los estudios, no hay inconvenientes en términos de duración del embarazo, peso del recién nacido o tasas de aborto espontáneo. No obstante, se debe prestar atención si existen condiciones de riesgo como amenaza de aborto, hemorragias o contracciones frecuentes durante la lactancia. En estos casos, se debe seguir el consejo del ginecólogo, quien podría recomendar la reducción o suspensión temporal de la lactancia.
Sensibilidad durante el embarazo
Es común que, durante la gestación, la sensibilidad en el pecho y el pezón aumente, lo que puede provocar molestias al amamantar. También, debido a cambios en la composición de la leche, que puede volverse más salada, algunos bebés optan por el destete espontáneo, especialmente en el segundo trimestre del embarazo.
Decisiones sobre la lactancia y el embarazo
La decisión final sobre si continuar o no con la lactancia durante un nuevo embarazo recae en la madre. Si el embarazo transcurre sin complicaciones y se sigue un control prenatal adecuado, los estudios indican que es seguro seguir amamantando. La madre debe valorar su bienestar, el del bebé que está en camino y el del niño que ya está recibiendo lactancia, tomando en cuenta los consejos médicos y su intuición personal.
Factores a considerar para continuar con la lactancia
- Salud materna: Verificar niveles adecuados de hemoglobina y salud general.
- Condiciones del embarazo: Ausencia de factores de riesgo como amenaza de aborto o hemorragias.
- Sensibilidad y comodidad: Tolerancia a la mayor sensibilidad del pecho durante las tomas.
En conclusión, tanto la posibilidad de concebir durante la lactancia como la de continuar amamantando tras quedar embarazada son aspectos que requieren una comprensión detallada de los procesos biológicos y hormonales de la mujer, así como la consideración de factores individuales que pueden variar en cada caso. Esperamos que esta información te sea de utilidad para navegar estas decisiones con confianza y conocimiento.