Las varices o «arañitas» en las piernas son un problema que afecta a muchas personas, independientemente del género, aunque son más comunes en mujeres. Sus causas pueden ser variadas, como el sedentarismo, exceso de peso, genética o una mala alimentación. Es un tema que crea incertidumbre y en muchas ocasiones, una búsqueda constante de soluciones. Conscientes de que estas preocupaciones son habituales, hemos creado este artículo que ofrece una rutina de ejercicios diseñada para combatir las varices. Los ejercicios son sencillos y se pueden realizar en la comodidad del hogar. A través de pasos claros y concisos, se explicarán las técnicas más efectivas para mejorar la circulación y tonificar los músculos de las piernas, contribuyendo así a la disminución de las varices. Recordamos que antes de iniciar cualquier rutina de ejercicios, es conveniente consultar con un fisioterapeuta o médico para asegurarse de que son adecuados para su condición.
Ejercicios boca abajo para combatir varices
Flexión de rodillas y círculos de tobillo
Para iniciar la rutina, túmbate boca abajo. Si sientes molestias en la zona lumbar, coloca una almohada debajo del abdomen. Flexiona ligeramente las rodillas y comienza a realizar círculos con los tobillos, veinte veces en cada dirección. Este ejercicio facilita la circulación sanguínea y ayuda a tonificar los músculos.
Plantiflexión dorsal
Aún en la misma posición, con las piernas estiradas, realiza una plantiflexión levantando los pies hacia arriba y luego hacia abajo. Repite este movimiento diez veces. Es importante mantener las piernas activas y los movimientos controlados.
Flexión alternada de rodillas
Continúa boca abajo y ahora dobla una rodilla mientras mantienes la otra estirada. Alterna las piernas y realiza este ejercicio hasta completar veinte repeticiones con cada una. Este ejercicio promueve la movilidad y contribuye al retorno venoso.
Ejercicios boca arriba para mejorar la circulación
Flexión y extensión de piernas
Acuéstate boca arriba y flexiona las piernas para luego estirarlas completamente. Realiza veinte repeticiones de este ejercicio. La flexión y extensión trabajan directamente sobre la circulación en las piernas y el fortalecimiento de los músculos.
Ejercicios de plantiflexión y dorsiflexión
En la misma posición, realiza veinte plantiflexiones, elevando y bajando las puntas de los pies como si acelerases un vehículo. Este ejercicio mejora la fuerza y la flexibilidad de los tobillos y favorece la circulación.
Movimiento de dedos de los pies
Flexiona una rodilla y sujeta tu pierna por debajo del muslo. Mueve los dedos de los pies como si intentaras agarrar canicas, abriéndolos y cerrándolos veinte veces. Repite el ejercicio con la otra pierna. Este ejercicio sencillo estimula la circulación en la planta del pie.
Ejercicios complementarios para las varices
Círculos de tobillo con piernas elevadas
Acuéstate boca arriba y eleva las piernas sin doblar las rodillas. Realiza veinte círculos de tobillo, diez en cada dirección. Mantén las piernas elevadas para favorecer el retorno venoso y disminuir la presión sobre las venas de las piernas.
Círculos de tobillo boca abajo
Para finalizar, túmbate boca abajo, si es necesario coloca una almohada bajo el abdomen para mayor comodidad. Flexiona las rodillas y realiza veinte círculos de tobillo en cada dirección. Este ejercicio refuerza la rutina, tonificando y promoviendo la circulación sanguínea en las extremidades inferiores.
La constancia en la realización de estos ejercicios es clave para obtener resultados positivos en la lucha contra las varices. También de seguir esta rutina, es recomendable llevar un estilo de vida activo y saludable para prevenir la aparición de nuevas varices y mejorar la condición de las ya existentes. La combinación de ejercicio físico y buenos hábitos alimenticios es fundamental para mantener una buena salud vascular.