La comodidad de una ducha al aire libre es indiscutible, especialmente cuando podemos disfrutarla en el propio jardín o junto a la piscina. En este artículo, exploraremos un elemento que aúna funcionalidad y sostenibilidad: la ducha solar. A menudo, surgen dudas sobre su instalación, uso y mantenimiento; aquí abordaremos estas cuestiones para resolver las posibles incertidumbres. Veremos cómo la innovación tecnológica ha hecho de la ducha solar un producto más sencillo y accesible, permitiéndonos disfrutar de agua caliente durante el verano sin consumo energético adicional. Te mostraremos el proceso de instalación paso a paso y te daremos recomendaciones de mantenimiento, para que puedas sacar el máximo partido a este eco-amigable accesorio de exterior.
Instalación de la ducha solar
Fijación al suelo
Una correcta instalación comienza por fijar la ducha al suelo. Es crucial asegurarse de que la base sea sólida y consistente. Para ello, se deben realizar marcas en el suelo y usar un taladro con la broca adecuada para el material elegido, ya sea hormigón u otro tipo consistente. Utilizaremos tacos especiales de expansión incluidos en el kit de instalación, que se fijarán al suelo golpeándolos con un martillo y apretándolos con una llave -preferiblemente de carraca para mayor rapidez.
Montaje de componentes
Una vez asegurada la base, procedemos a montar los componentes. Comenzando por la parte superior, instalamos el rociador o alcachofa, utilizando teflón en las roscas para garantizar la estanqueidad. Es importante no forzar las piezas más de lo necesario para evitar dañar las roscas internas. El rociador, además, dispone de zonas de goma blanda que previenen incrustaciones de cal.
Conexión y uso del grifo monomando
Instalación del monomando
El grifo monomando se instala retirando previamente el indicador de temperatura y ajustando el tornillo prisionero. Al igual que con el rociador, es fundamental aplicar teflón en las piezas roscadas. A continuación, se fija la maneta y se toma nota del aviso de precaución: el agua puede salir muy caliente tras estar expuesta al sol.
Lavapiés y consejos de seguridad
Algunos modelos de ducha solar incluyen un lavapiés con grifo, que también puede servir para conectar una manguera. Para su instalación, es igual de importante usar el teflón para asegurar su correcto funcionamiento. También, siempre se debe comprobar la temperatura del agua antes de su uso para evitar quemaduras, especialmente después de largas horas de insolación.
Cómo funciona la ducha solar
Principio de funcionamiento
La ducha solar opera mediante la acumulación de agua en su depósito interior, la cual se calienta gracias a la radiación solar. Dispone de dos tomas de agua fría: una para el mezclador y otra para llenar el depósito. La presión del agua entrante empuja el agua caliente hacia el mezclador, lo que puede resultar en una presión ligeramente menor en comparación con la del agua fría.
Mantenimiento y recambios
Limpieza y prevención de incrustaciones
El mantenimiento de la ducha solar es mínimo. En áreas con agua dura, es recomendable emplear limpiadores antical para evitar incrustaciones que afecten la eficiencia de la ducha. También, es posible que se necesite limpiar o reemplazar el cartucho cerámico del monomando en caso de bloqueo por cal.
Preparación para el invierno
Es crucial vaciar completamente la ducha al final de la temporada en zonas con heladas para evitar daños. Esto se realiza abriendo el desagüe con una llave. La conexión para la entrada de agua se realiza con un conector rápido roscado, facilitando la conexión y desconexión de la manguera.
En resumen, la ducha solar es una solución ecológica y práctica para aquellos que buscan disfrutar de la comodidad del agua caliente al aire libre. Su instalación y mantenimiento son sencillos, y su funcionamiento aprovecha al máximo la energía solar. Escoger el lugar más soleado será el último paso para garantizar el óptimo rendimiento de este innovador producto.