La cocina es un arte que nos permite explorar sabores y tradiciones de diferentes culturas. Dentro de la gastronomía española, un plato clásico y querido por todos es el Arroz con Pollo. Este manjar, además de ser delicioso, es económico y sencillo de preparar. Si bien existen diversas maneras de cocinarlo, hoy vamos a compartir una versión que no solo cautivará tu paladar, sino que también se prepara rápidamente. A lo largo de este artículo, te guiaremos paso a paso para que logres un arroz perfecto, lleno de color y sabor, y un pollo jugoso que se deshaga en tu boca. Resolveremos dudas comunes y te daremos consejos para que este plato sea un éxito en tu mesa.
Preparación de los ingredientes
El primer paso en nuestra receta es asegurarnos de que tenemos todos los ingredientes listos y a mano. Esto implica picar finamente los vegetales que usarán para dar sabor al arroz. Empezaremos por una media cebolla dulce de buen tamaño, si tus cebollas son más pequeñas, puedes usar una entera. Continuaremos con un trozo de pimiento verde, rojo y amarillo, aunque puedes elegir usar solamente uno. La variedad de colores enriquece visualmente el plato, pero es opcional según tu preferencia.
Picado de ajo
Para el ajo, emplearemos un utensilio muy práctico: el prensa ajos. Con él, picaremos dos dientes de ajo que se integrarán directamente en la paella. También, apartaremos tres dientes de ajo con piel, los cuales aplastaremos ligeramente. Estos últimos se usarán para aromatizar el aceite y luego se retirarán.
Cocción del pollo
La elección del pollo es versátil: puedes utilizar muslos, alitas o incluso un pollo entero troceado. En nuestra receta emplearemos cinco muslitos de pollo. En una paellera, que es la opción recomendada pero no obligatoria, calentamos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra a fuego medio-alto y añadimos los dientes de ajo aplastados junto con el pollo. Dejaremos que el pollo se dore durante unos 3 o 4 minutos por cada lado, asegurándonos de que se cocine uniformemente y adquiera un bonito color dorado.
Retirada del pollo
Una vez que el pollo esté dorado, aproximadamente después de 20 minutos, lo retiraremos y lo reservaremos en un plato. También retiraremos los dientes de ajo si es necesario para evitar que se quemen.
El sofrito: base de nuestro arroz con pollo
Con la paellera aún sobre el fuego medio, añadiremos los dientes de ajo picados y dejaremos que se frían ligeramente. A continuación, incorporaremos la cebolla, dejando que se cocine hasta que esté transparente y ligeramente dorada, para luego agregar los pimientos picados. Es importante remover los ingredientes de vez en cuando para que se cocinen de manera uniforme y liberar así todo su sabor.
Añadiendo el arroz y los condimentos
En este punto, agregaremos 300 gramos de arroz redondo a nuestra paellera, distribuyéndolo bien para que absorba los sabores de nuestro sofrito. Es el momento de «perlar» el arroz, es decir, lo dejaremos tostar ligeramente. Añadiremos sal al gusto, un poco de cúrcuma para dar color, y un toque de pimentón dulce para realzar el sabor. Asegúrate de mezclar bien todos los ingredientes antes de proceder al siguiente paso.
Cocción y presentación final
Vierte un litro de caldo caliente, preferiblemente de verduras o pollo, sobre el arroz. Es crucial que el caldo esté caliente para no interrumpir la cocción. Coloca la paellera a fuego alto y reincorpora los trozos de pollo a la preparación, dejando cocinar a alta temperatura durante unos seis minutos. Luego, reduce el fuego a medio y deja que el arroz se cocine completamente. El tiempo puede variar, pero suele estar listo en unos quince minutos.
Una vez finalizado el tiempo de cocción, tendrás un arroz de grano perfecto con un pollo tierno y jugoso. Con las cantidades indicadas, se obtienen aproximadamente cuatro o cinco porciones. Anímate a preparar esta receta clásica y disfruta de una comida que, sin duda, será del agrado de todos.